jueves, 23 de abril de 2020

Semana del libro 6ºA y 6ºC. BINOMIO FANTÁSTICO

¡Buenos días y FELIZ DÍA DEL LIBRO!



Este jueves y viernes os proponemos un juego literario.

Un truco que utilizaba Rodari era el binomio fantástico. Consiste en elegir dos palabras, aparentemente desconectadas y hacer un cuento a partir de de las mismas.

Lee este ejemplo; lo escribió Rodari para un libro suyo llamado “Gramática de la fantasia”, donde explica sus técnicas para escribir cuentos.

Tomemos las palabras «perro» y «armario». El procedimiento más simple para relacionarlas es unirlas con una preposición articulada. Obtenemos así diversas figuras:

el perro con el armario - el armario del perro - el perro sobre el armario - el perro en el armario
Cada una de estas situaciones nos ofrece el esquema de algo fantástico.

1. Un perro pasa por la calle con un armario a cuestas. Es su casita, ¿qué se le va a hacer? La lleva siempre consigo, como el caracol lleva su concha. Es aquello de que sarna con gusto no pica.

2. El armario del perro me parece más bien una idea para arquitectos, diseñadores o decoradores de lujo. No sé si podría contener también una historia.

3. El perro en el armario, a ojos cerrados, es una posibilidad más atractiva.

“El doctor Polifemo regresa a casa, abre el armario para sacar su batín, y se encuentra con un perro. Inmediatamente se nos presenta el desafío de hallar una explicación a esta aparición. Pero la explicación no es tan urgente. Resulta más interesante, de momento, analizar de cerca la situación.
El perro es de una raza difícil de precisar. Tal vez es un perro de trufas, tal vez es un perro de ciclámenes. ¿De rododendros...? Amable con todo el mundo, mueve alegremente la cola y saluda con la patita, como los perros bien educados, pero no quiere saber nada de salir del armario, por más que el doctor Polifemo se lo implore.
Más tarde, el doctor Polifemo va a tomar una ducha y se encuentra otro perro en el armarito del baño. Hay otro en el armario de la cocina, donde se guardan las ollas. Uno en el lavavajillas. Uno en el frigorífico, medio congelado. Hay un caniche en el compartimiento de las escobas, y hasta un chihuahua en el escritorio.
Llegado a este punto, el doctor Polifemo podría muy bien llamar al portero para que le ayudase a rechazar la invasión canina, pero no es esto lo que le dicta su corazón de científico. Por el contrario, corre a la carnicería para comprar diez kilos de filete para alimentar a  sus huéspedes. Cada día, desde entonces, compra diez kilos de carne. 
Y así comienzan sus problemas.
El carnicero comienza a sospechar. La gente habla. Nacen los rumores. Vuelan las calumnias. Aquel doctor Polifemo... ¿no tendrá en casa algunos espías atómicos?  ¿No estará haciendo experimentos diabólicos con todos aquellos filetes y bistecs? 
El pobre doctor pierde la clientela. Llegan soplos a la policía. El comisario ordena una investigación en su casa. Y así se descubre que el doctor Polifemo ha soportado inocente tantos problemas por amor a los perros.”

Os proponemos los siguientes binomios:

niño – ventana                      coche – mar               viaje – fantasma         luces – montaña

¡A trabajar!

Igualmente, los cuentos que nos mandéis al correo, hasta el martes, los incluiremos en el blog, para que los lean los demás niños del colegio. 😘